Solo el 21,5% de los trabajadores cántabros puede teletrabajar

El estado de alarma generado por el Covid-19 ha desdibujado las relaciones laborales y, para muchos, ha hecho emerger nuevas formas de relación entre la empresa y sus trabajadores. Pero no todos los puestos permiten el teletrabajo. Los operarios de las fábricas, conductores de vehículos, dependientes de tiendas, cocineros o camareros, entre otras tantas profesiones, no tienen la posibilidad de realizar su trabajo desde casa. Según un estudio realizado por Randstad, en Cantabria, cerca de 53.000 personas disponen de la opción de teletrabajo, lo que supone únicamente el 21,5% de la población ocupada.

El porcentaje de trabajadores con posibilidad de teletrabajar es en la comunidad 0,8 puntos inferior a la media del país (22,3%). A nivel nacional, más de 4,4 millones de personas disponen de la opción de teletrabajo, lo que se traduce en el 22,3% de la población ocupada, que en 2019 superaba los 19,7 millones de personas.

Los datos varían notablemente según las distintas ocupaciones. Así, el 49,8% de quienes disponen de esta opción de teletrabajo a nivel nacional corresponde a técnicos y profesionales científicos e intelectuales (2.194.300), seguidos de contables, administrativos y otros empleados de oficina, que suman el 20% del total  (890.930 trabajadores). Los perfiles de dirección y gerencia (781.300) suponen el 17,7% y los perfiles técnicos y profesionales de apoyo el 10,7% (472.980).

Atendiendo únicamente al perfil profesional, el 100% de mandos directivos y gerentes dispone de opciones de teletrabajo, mientras que en el caso de técnicos y profesionales científicos e intelectuales la cifra es del 59,8%. En el caso de contables administrativos y otros empleados de oficina el porcentaje sería del 43,6%, mientras que los técnicos y profesionales de apoyo sumarían un 22,3%.

Por comunidades autónomas, las que cuentan con mayor número de trabajadores con opción a teletrabajo y están por encima de la media nacional son la Comunidad de Madrid, seguida de Cataluña, País Vasco, Navarra y Asturias.

“El teletrabajo es una opción muy positiva tanto para trabajadores como empleadores. Al profesional le permite conciliar su vida personal con la profesional y, a su vez, la empresa contribuye a la satisfacción del empleado, lo que redunda en una mayor eficacia y, en consecuencia, en resultados de negocio más positivos”, afirma Valentín Bote, director de Randstad Research.