Esade ve «prácticamente seguro» que la economía entre en recesión durante el segundo semestre del 2020

Advierte de que España cuenta con menos margen de maniobra que en 2008 para hacer frente a una crisis

Esade ve «prácticamente seguro» que la economía española entre en recesión durante el segundo semestre de 2020, aunque admite que resulta difícil realizar previsiones de crecimiento cuando existe incertidumbre acerca del desarrollo de los acontecimientos.

Asimismo, destaca que España cuenta hoy en día con un menor margen de maniobra para adaptar su política fiscal, y también la monetaria, con el fin de afrontar una recesión económica derivada de la crisis del coronavirus, comparado con el momento en el que se encontraba cuando estalló la última gran crisis económica de 2008.

Así lo afirman los profesores del departamento de Economía, Finanzas y Contabilidad de Esade Pedro Aznar y Pedro Rey, que explican que el país registra ahora un nivel de endeudamiento cercano al 100% del Producto Interior Bruto (PIB), frente al 40% de 2008.

«Se va a producir una crisis inmediata de liquidez y no es difícil prever que pronto se convierta en una crisis de solvencia; muchas empresas entrarán en pérdidas. Asimismo, la caída de la producción también implicará una caída en la necesidad de mano de obra», explica Aznar.

Los expertos de Esade creen que las medidas anunciadas por el Gobierno para ayudar a las empresas y proteger el empleo en materia de política fiscal, como los aplazamientos del pago de impuestos, ayudas a los más desfavorecidos o la flexibilidad en la tramitación de los ERTEs «pasarán factura a la capacidad de recaudación de impuestos», algo necesario, a su vez, para la financiación de estas políticas.

Por ello, los expertos destacan «la importancia de las inyecciones de liquidez de los bancos centrales en el sistema financiero, que ha de actuar como transmisor para que la economía en su conjunto pueda hacer frente a los desajustes de pago».

MAYOR RESPUESTA DE LA UE

En el ámbito de la Unión Europea ya se dado una primera señal en este sentido, con la flexibilización del objetivo de déficit, pero los expertos creen que todavía puede dar otros pasos y avanzar hacia una mayor coordinación en materia de política fiscal y económica.

Uno de los factores más determinantes para la economía de España frente a la crisis del Covid-19 es su dependencia del turismo, uno de los sectores más importantes del PIB nacional y que se verán «más castigados» por el impacto en la demanda agregada y en el empleo. De hecho, a finales de 2019, el sector del turismo contaba con 2,3 millones de afiliados a la Seguridad Social, sobre un total de 19 millones de afiliados.

Otro condicionante de la estructura económica del país es la predominancia de las pequeñas y medianas empresas, que son «más vulnerables en estas circunstancias», al que se suma el impacto en la cadena de suministros que afectará a la oferta agregada.