El Racing ya tiene patrimonio
El Boletín del Instituto de Contabilidad y Auditoría admite que el coste histórico del estadio de El Sardinero sea considerado como una inversión del club, a pesar de que fue hecha por la ciudad de Santander y que ésta sigue siendo la propietaria. En realidad, lo que se reconoce es el valor del contrato de larga duración que vincula el campo con el equipo de forma indefinida, una titularidad de uso que, como la concesión de un aparcamiento para su explotación, tiene un valor.
Desde que vendió el viejo estadio de El Sardinero al Ayuntamiento de Santander, el Racing es un club sin más propiedad que los derechos sobre los jugadores y ha pasado por momentos de grave descapitalización. La consideración del campo como un activo hace que su situación patrimonial pase a ser bastante saneada, algo que resulta casi inédito en el club.
El Racing podrá incluir el valor original del campo como un activo inmaterial, pero eso sí, deberá dedicar cada año una cuantía a su amortización.
La respuesta del ICAC es vinculante también para cualquier otro equipo que pueda encontrarse en circunstancias parecidas.
Las instalaciones de La Albericia
El Racing puede mejorar su balance aún más de conseguir prorrogar el alquiler de las instalaciones de La Albericia donde entrena. Las diferencias con el anterior alcalde de Santander impidieron concretar una prolongación del arrendamiento, que vence este año, pero la intención del club es poder comprometer estas instalaciones, propiedad del Ayuntamiento, por al menos por veinte años más y que mantengan la calificación urbanística de uso deportivo.
En este caso, se reduciría notablemente la asignación para el fondo de reversión que todos los años debe dotar el equipo para amortizar los dos campos de hierba artificial, graderíos, una sala de prensa y otras instalaciones que ha construido allí y que pasarán al Ayuntamiento cuando venza el contrato de arrendamiento.
