Software cántabro para vender los coches europeos
La empresa informática cántabra que más ha crecido en los últimos años está relacionada, curiosamente, con el sector de automoción. El software que produce va dirigido exclusivamente a los concesionarios de automóviles y de camiones, y les permite no sólo ofrecer instantáneamente los precios de un modelo personalizado con las opciones que prefiere un comprador, las compatibilidades entre unas y otras, los colores de los modelos en stock o el surtido de piezas de repuesto para el taller.
Quiter Auto Web, un software para la gestión integral de los concesionarios se ha convertido en la segunda aplicación de este tipo más utilizada en España y en marcas como Fiat, Peugeot o Daf, cuyos fabricantes le han dado su respaldo, está implantada en cerca del 90% de los concesionarios. Actualmente, el programa de Quiter se utiliza en más de 700 puntos de venta de Europa y América Latina.
Gestión integrada
Los concesionarios de automóviles siempre ha dispuesto de herramientas informáticas específicas, pero cuando Javier Polidura decidió en 1995 crear su propia empresa, Quiter, buscó una línea diferenciada del resto. Al frente de un equipo de ocho personas, Polidura diseñó una aplicación específica destinada a la gestión de grupos de concesionarios que disponían de diferentes marcas.
Además de unificar la gestión del grupo, el software de la empresa cántabra les permitía integrar todas las áreas de negocio, desde el taller y los almacenes de recambios hasta el área comercial y contable. Al tener una única base de datos se evitaba duplicar tareas cuando, por ejemplo, un mismo cliente se relaciona con diferentes departamentos, y se agilizaban las operaciones.
El programa informático de Quiter tiene un diseño intuitivo, fácil de utilizar por el usuario y probablemente eso sirvió para empujarlo con más fuerza en el disputado sector de los concesionarios.
La homologación de fabricantes
El reconocimiento de los fabricantes de automóviles no se hizo esperar. Apenas un año después de su creación, el grupo Fiat homologaba el software de la empresa cántabra. Fue el primer gran respaldo de una marca importante, al que siguió en 1999 el de Peugeot y en fechas más cercanas el del grupo Volkswagen, además de Renault, Honda, Jaguar, Volvo, Mazda, Land Rover, Ford, Toyota y Daf Camiones.
El aval de estas marcas no sólo facilita la penetración del producto en las redes de concesionarios, sino que abre la puerta a los creadores del programa para relacionar este software con los sistemas centrales de las propias marcas (envío de una garantía, pedido de vehículos o de recambios, etc), y con programas específicos de los fabricantes de automóviles. Un ejemplo de esta interconexión es el configurador automático de vehículos, un programa que permite al cliente singularizar su pedido, eligiendo los extras que desea para su automóvil.
Expansión internacional
El respaldo de las marcas también está resultando decisivo para la internacionalización de Quiter. El impulso inicial procedió de Peugeot que, tras homologar el software cántabro en 1999, invitó a Quiter a adaptar su programa para otros países de Europa. Ese mismo año se fundó Quiter Internacional para explorar esos mercados. El mismo fabricante fue también el patrocinador del desembarco de la firma cántabra en Argentina, donde se creó en el año 2000 una nueva filial del grupo Quiter con personal de programación y servicios propios. A pesar de las difíciles circunstancias por las que ha atravesado el país, la aplicación de Quiter está implantada ya en 30 concesionarios argentinos.
La empresa cántabra ha abierto otros frentes internacionales con la reciente homologación de Fiat para la red de concesionarios de Portugal; ha desarrollado una versión del programa (adaptación a impuestos, legislación, etc.) para su implantación en Alemania, y proyecta hacer lo mismo para el mercado francés.
El sector de la distribución del automóvil atraviesa tiempos turbulentos, por los cambios exigidos por la legislación europea, pero eso no ha perjudicado a Quiter. “Las acciones que están realizando las marcas, depurando sus redes de concesionarios y otorgando nuevas concesiones, nos abren nuevas posibilidades de mercado”, explica un portavoz de la empresa.
La aparición de concesionarios multimarca, con necesidades cada vez más complejas, no sólo no será un problema, sino una oportunidad de negocio. Y la amenaza de que los grandes centros comerciales o la propia Internet acabe con el sistema de concesionarios tal como hoy lo conocemos sólo es una eventualidad a muy largo plazo, a tenor del escaso interés que han demostrado las marcas en acabar con el sistema actual de distribución.