UN 1,7% DE MORA EN LOS CRÉDITOS ICO

Algo más de tres años después del estallido de la pandemia, los créditos bancarios con aval público del ICO creados por el Gobierno para evitar una debacle masiva de empresas, pymes y autónomos por la crisis sanitaria muestran un comportamiento más positivo del que cabía esperar cuando se decretó el confinamiento en 2020. La morosidad de estos préstamos se limita al 1,67% y ha obligado al Estado a abonar 391 millones de euros a la banca en virtud de las garantías que concedió. Las 39.800 operaciones morosas son un 3,3% de las firmadas, y esa diferencia en las proporciones indica que quienes pidieron cantidades más pequeñas –autónomos y pymes– son los que están teniendo algún problema más para hacer frente a las cuotas.