La ciencia al día
Módulos en lugar de componentes
La industria del automóvil le pide a sus suministradores módulos cada vez más integrados en lugar de componentes separados. Para responder a esta nueva perspectiva industrial, ingenieros europeos están desarrollando un proceso de producción más rápido, barato y de mejor calidad para hacer submódulos de suspensión y dirección.
Ahora, los diferentes elementos sufren tratamientos separados, por ejemplo, contra la corrosión, ya que cada uno se fabrica en lugares o etapas distintas. Después, son ensamblados por métodos de unión que, con el paso del tiempo, tienden a romperse o aflojarse.
Además de racionalizar la producción, el nuevo proyecto mejorará la calidad de estos productos, ya que tiene previsto usar un acero de baja aleación y alta dureza llamado HSLA como material de base para la estructura de los submódulos que, además de ser más seguro y ligero, ofrece mayor resistencia.
El agua de la nieve
Un grupo de científicos europeos ha desarrollado un nuevo sistema informático para la predicción de la disponibilidad de agua y su distribución, que servirá para reorganizar el suministro en lugares montañosos, como Los Alpes.
La nieve se funde cada primavera y, con el calentamiento global, en más cuantía, lo que no sólo afecta a las cumbres, sino también a los ríos y a la posible recarga de los acuíferos.
Los nuevos programas valoran factores como la distancia de la nieve y las previsiones de deshielo recogidas por medio de satélites y de observaciones in situ. Así se podrá calcular las disponibilidades en cada momento, acumular reservas y mejorar la gestión del agua. Ya que la nieve se derrite, que al menos tenga el mejor aprovechamiento.
El primer satélite estudiantil
Nada mejor para estimular las investigaciones juveniles que hacer un cohete y lanzarlo al espacio. Al menos, eso piensan en Rusia, donde bajo el lema “Lanza tu sueño”, han reunido a 300 estudiantes universitarios europeos dispuestos a alcanzar el cielo.
El cohete que han construido es de andar por casa, y pesa 62 kilos, más o menos como una lavadora, pero va a funcionar, según los profesionales en la materia. A bordo van tres satélites de un kilo cada uno, lo que supone una novedad en todo tipo de lanzamientos.
Cuando se encuentre en órbita, tomará unas fotos de La Tierra y funcionará como un radiotransmisor.
Ingesta controlada de medicinas
Aquellas personas que tienen que tomar medicamentos a menudo necesitan un sistema de ingestión que no sea muy invasivo y esté bien controlado, algo que ahora no se puede asegurar, sobre todo cuando se trata de ancianos.
Para conseguir que las medicinas se administren en el momento y en la cuantía adecuados se ha creado un sistema inteligente de suministro con ayuda de las nuevas tecnologías, en concreto, de biosensores. Eso facilitará dispensarlas en bajos volúmenes y la integración de todos los componentes de una forma más manejable.
La clave es un pequeño aparato dental, una especie de diente de quita y pon. A simple vista, parece idéntico a cualquier otro, tanto que incluso permite comer con él puesto o hablar sin sesear y no se nota que es postizo.
Este diente, que podría parecer uno de los artefactos del mismísimo James Bond, permite que la medicina contenida dentro se vierta en el sistema digestivo poco a poco y según las necesidades del paciente, ya sea por días, semanas o meses. Además, avisa cuando se va a acabar el depósito.