Preacuerdo en el convenio de obradores y pastelería de Cantabria, que afecta a 900 trabajadores

Los sindicatos CCOO y UGT y la patronal han alcanzado un preacuerdo para el convenio de obradores y despachos de confitería y pastelería de la región, que afecta a unas 900 trabajadores del sector, donde alrededor del 80% son mujeres, y que estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2025.

Según ha informado CCOO, el documento establece incrementos salariales para 2022 de un 6,75% con atrasos desde el 1 de enero de este año, mientras que para los próximos tres años el incremento se ajustará al IPC real con un tope del 4,5% en 2023 y del 4% para los dos años siguientes.

Para el secretario de Negociación Colectiva de la Federación de Industria de CCOO en Cantabria, Santiago Pelayo, con este preacuerdo «se logra garantizar el mantenimiento del poder adquisitivo» de los trabajadores del sector y «se avanza también en materias sociales y de salud laboral».

En este sentido, el preacuerdo recoge que el 1 de enero será día festivo no laborable en sustitución del 15 de septiembre, que las vacaciones serán de 33 días naturales sin contar festivos y, además, se incluye la acumulación del permiso de lactancia como nuevo derecho.

Además, se eliminan las categorías profesionales de ayudante dependiente, peón (obrador) y aprendices y la cuantía del plus de transporte se trasladará al salario base.

«Como no podría ser de otra manera, se va a adecuar todo el contenido del convenio a la normativa vigente tras la reforma laboral y se va a ampliar el ámbito funcional del convenio a actividades de venta, degustación y comercialización», ha señalado Pelayo, quien ha advertido que «CCOO va a estar vigilante para que se cumplan todos los preceptos de la nueva normativa laboral».

Por otra parte, el documento firmado, que se tiene que ratificar el 17 de marzo, cuando la comisión negociadora también firmará las tablas salariales para 2022, recoge que los centros de trabajo con horno deberán entregar a los trabajadores que presten servicios en ellos un par de guantes al año específicos para hornos y que la cuantía que cada trabajador cobre en concepto de antigüedad no computará a efectos de cumplir con el Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

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