Cantabria, donde más crece la contratación de personas con discapacidad en 2021, un 55%

Cantabria ha sido la región española donde más ha crecido la contratación de personas con discapacidad en 2021, un 55%, frente a la media nacional del 32%, según el análisis de la Fundación Adecco, a partir de los datos del Servicio Público de Empleo Estatal.

La preponderancia de ofertas de empleo en el área industrial, comercio y sanidad durante la pandemia ha hecho que la región cántabra haya logrado superar los niveles de contratación de personas con discapacidad previos a la pandemia, incrementándose un 16%. A nivel nacional, sin embargo, aún no se han alcanzado las cifras de contratación de personas con discapacidad precovid, siendo un 3% inferiores.

El año 2021 se ha saldado con 2.059 contratos a personas con discapacidad en Cantabria, frente a los 1.328 de 2020, pero todavía a un 7,3% de distancia de la cifra alcanzada en 2019 (1.773).

La recuperación del empleo de las personas con discapacidad está resultando más rápida que la de la población general. Así, la contratación en Cantabria ha crecido en una menor proporción en 2021 (29,6%) y la cifra de cierre de año es todavía un 8,1% inferior a tiempos prepandemia.

Esta recuperación de los niveles de actividad previos a la pandemia dibuja unas previsiones optimistas para 2022 y todo apunta a que el año en curso se cerrará con una nueva cifra récord de contratación de personas con discapacidad en Cantabria.

A pesar de este positivo pronóstico, existen muchos retos que siguen evidenciando la desigualdad de las personas con discapacidad en el ámbito del empleo.

Según el director general de la Fundación Adecco, Francisco Mesonero,
la participación de las personas con discapacidad en el mercado laboral en Cantabria es muy baja y su tasa de actividad apenas alcanza un 39,3%, lo que quiere decir que el 60,7% de los que tienen edad laboral no tiene empleo ni lo busca.

«Esta realidad, unida al gap formativo que presentan con respecto a la población general, urge una revisión de las políticas activas de empleo, a través del refuerzo de la colaboración público-privada para aprovechar el conocimiento que el tercer sector tiene de la discapacidad y del empleo», ha sostenido.

Por ello ha considerado necesario apostar por un nuevo modelo de capacitación que no solo incremente la formación académica de los profesionales con discapacidad y les permita conectar con los empleos emergentes, sino que les dote de habilidades y competencias estratégicas para superar un proceso de selección, ya que a menudo encuentran dificultades adicionales, ha señalado Mesonero.

La penetración de los trabajadores con discapacidad en el mercado laboral ordinario representa otro de los grandes retos. Actualmente, el 73,7% de los contratos en Cantabria se suscriben en el ámbito protegido (Centros Especiales de Empleo). «Es en la empresa ordinaria donde se produce la inclusión en su máximo exponente. Por ello, sin negar el importante rol de los Centros Especiales de Empleo en el proceso de inclusión, resulta necesario establecer indicadores reales de tránsito a la empresa ordinaria», ha sostenido Mesonero.

NACIONAL

En España, la contratación de personas con discapacidad creció un 32% en 2021 y la cifra de cierre de 2021 ya roza la alcanzada en 2019, situándose a un 3% de distancia.

En concreto, en el año 2021 las personas con discapacidad han suscrito un total de 114.315 contratos de trabajo, 27.639 más que en 2020, cuando fueron 86.706. La cifra de 2021 se acerca a los 117.818 de 2019, antes de la crisis de la Covid-19.

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