El Gobierno aprecia un efecto estacional «más moderado» y da por cerrado el debate de fijos discontinuos

El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha destacado este martes que la subida del paro en agosto en 21.884 personas no sólo es el menor aumento en este mes desde 2016, sino que es un 44% inferior al incremento medio del paro en los últimos 22 años (40.000 personas).

«Por lo tanto, efecto estacional sí, pero mucho más moderado y atenuado de lo que ha ocurrido en las últimas dos décadas», ha afirmado Pérez Rey durante la rueda de prensa que ha ofrecido junto al secretario de Estado de Seguridad y Pensiones, Borja Suárez, para presentar los datos de paro y afiliación del mes de agosto.

Pérez Rey ha explicado que la subida del paro en el sector servicios en más de 20.000 personas se explica por las características estacionales del mes de agosto, mientras que los incrementos, más moderados, registrados en industria y construcción son «ajustes» que tienen que ver con las altas temperaturas del periodo estival y con las vacaciones en algunos de estos sectores.

En cuanto a la contratación, el secretario de Estado de Trabajo ha destacado que en agosto se logró un «nada desdeñable» porcentaje de contratación indefinida del 37,5%, frente al 8% que se registraba en este mismo mes antes de la reforma laboral.

Rspecto a la reducción del número de contratos efectuados, medio millón menos de lo que era habitual en un mes de agosto antes de la reforma laboral, Pérez Rey lo ha atribuido a la menor rotación del mercado laboral. «El empleo en España cada vez se sostiene sobre menos contratos y esto implica menos precariedad, menos rotación laboral y, por tanto, menos ingeniería jurídico-contractual para sostener el empleo», ha defendido.

El secretario de Estado de Trabajo ha subrayado que los 389.735 contratos fijos firmados en agosto son el triple de los que se firmaban en el mismo mes de 2019, antes de la reforma laboral, mientras que los temporales son 750.000 menos que entonces.

Pérez Rey también ha puesto el acento en el descenso del paro en más de 130.000 personas en el último año y en el hecho de que el paro juvenil, pese a haber repuntado en agosto, se encuentra en mínimos de la serie histórica. Lo mismo sucede con el paro femenino que, aunque creció en agosto, registra su menor nivel en un mes de agosto desde 2008.

«Se consolida mes a mes la gran transformación en el mercado de trabajo español de impulsar la contratación estable, indefinida y con derechos frente a lo que era habitual hasta 2021, que era la inestabilidad, la precariedad y la rotación como constante», ha remarcado.

BUENA DINÁMICA DEL MERCADO LABORAL: 52 MESES CRECIENDO EN AFILIACIÓN

Por su parte, el secretario de Estado de Seguridad Social, Borja Suárez, ha afirmado que la caída de la afiliación media en 193.000 personas registrada en agosto es inferior a las experimentadas antes de la pandemia, en 2019, y ha destacado que la afiliación desestacionalizada, que creció en 30.000 personas en agosto, ofrece «una fotografía muy positiva de la dinámica del mercado de trabajo».

«No es una cuestión menor que llevemos 52 meses de crecimiento de la afiliación en términos desestacionalizados», ha señalado Suárez, que ha añadido que esto sitúa el total de ocupados al borde de los 21,2 millones, «una cifra verdaderamente impresionante, histórica y hasta hace muy poco tiempo inimaginable».

Suárez ha indicado que el ritmo de crecimiento del empleo en España, a pesar de todas las incertidumbres, «sigue siendo de enorme dinamismo y confirma la buena marcha» de la economía y el mercado laboral español.

Suárez ha asegurado que este dinamismo del empleo actúa como un elemento de atracción para trabajadores extranjeros, que «son perfectamente absorbidos» por el mercado de trabajo español, y no sólo en sectores de bajo valor añadido, sino también en actividades como información y comunicaciones.

El secretario de Estado ha destacado además la mejora de la calidad del empleo desde la reforma laboral y ha puesto como ejemplo de ello el crecimiento de las bases de cotización de las mujeres y de los más jóvenes, por encima de la media nacional.

«Esto es una señal clara de mejora de la calidad del empleo y que está directamente vinculada con la consolidación de un modelo, de un mercado de trabajo, donde la temporalidad se ha situado ya en umbrales equivalentes a los umbrales de referencia del ámbito europeo», ha añadido.

Entrando en las distintas modalidades de contratación, Suárez ha remarcado «la estabilización e incluso caída» del peso de los fijos discontinuos dentro del conjunto de contratos indefinidos.

«El año pasado, en el mes de agosto, había 14.000 fijos discontinuos más que este año, representaban un 5,3% del total de indefinidos, ahora son el 5,1%. Yo creo que hay una estabilización y esto es una buena noticia», ha apuntado.

Para Suárez, los datos constatan que el trasvase de la contratación temporal a las actividades típicas de los contratos fijos discontinuos se produjo sobre todo en el año 22 y en la primera parte de 2023. «A partir de ahí, la situación se ha estabilizado (…) Yo creo que con esto ya deberíamos pasar o dar por cerrado todo el debate en torno a los fijos discontinuos», ha concluido.