LA ciencia al día
¿HAY VIDA EN OTROS PLANETAS?- Los científicos de la Agencia Espacial Europea han unido sus esfuerzos con los del Buscador Terrestre de Planetas de la NASA para usar conjuntamente una nueva técnica que pueda llevar al descubrimiento de vida en otros planetas. Para efectuar esa búsqueda se centran en las variedades reveladoras de la luz que esparce un planeta en su movimiento de rotación, pues la intensidad de la luz emitida y el color pueden suministrar pistas en cuanto a la superficie y la atmósfera e, incluso, desvelar la presencia de vida. La nueva técnica alcanzaría hasta los sistemas planetarios que distan 50 años-luz de La Tierra.
AVIACION Y MEDIOAMBIENTE.– La aviación tiene dos puntos débiles: el ruido y la contaminación del aire. Pese a que el nivel de ruido del Airbus 320 es cerca de 20 db menos que el de un Caravelle o un Boeing 727, o que el consumo de combustible se ha reducido en un 70%, el largo período de vida de un avión (de 20 a 25 años de media), significa que se necesita tiempo para introducir los avances tecnológicos. Aunque la contribución de la aviación a la producción de CO2 sigue siendo moderada (alrededor de un 12% de la contaminación atribuida al transporte en general), la actual generación de aviones presenta otros dos aspectos de especial preocupación: el óxido de nitrógeno, y el vapor de agua, que podrían estar contribuyendo a un aumento de los cirros y, por tanto, al calentamiento de la Tierra. Actualmente hay dos proyectos que en Europa se ocupan de estos dos fenómenos: el EUX Noise, que desde 1998 trata de controlar no sólo el ruido de los motores sino también el aerodinámico que producen las alas, los dispositivos de despegue, el fuselaje y el tren de aterrizaje. Por lo que hace a la contaminación, desde marzo de 2000 hay una plataforma industrial comprometida en introducir un conjunto de técnicas innovadoras en la construcción del motor para reducir la combustión aerotermodinámica, el enfriamiento, los materiales y los procesos.
LA CIENCIA AL SERVICIO DEL ARTE.– Una empresa holandesa ha patentado un sistema para el análisis no destructivo de las obras de arte pictórico. Se trata de una unidad transportable que combina todas las técnicas de imagen que usan los museos para la verificación y restauración de pinturas. Las imágenes, obtenidas en tiempo real, permiten al usuario analizar en forma fluorescente, ultravioleta o infrarroja la estructura de la pintura en el ordenador mientras lleva a cabo el trabajo de restauración.
SOFTWARE DE INTERMEDIACION.– La tecnología de información en Internet va a pasar muy pronto del tejido (web) a la cuadrícula (grid). De acuerdo con la Ley de Moore, el poder de los ordenadores se dobla cada 18 meses y en el espacio de los últimos quince años sus prestaciones se han incrementado un millón de veces. Aún así, y es lo sorprendente, todavía no se cubren las necesidades de cálculo en aplicaciones tales como la genómica, la climatología, la mecánica de fluidos o la astrofísica.
Los promotores del nuevo WWG toman como base el concepto de “grid” elaborado por Ian Foster y que consiste en descentralizar las fuentes de los ordenadores usando una red de alta velocidad que una los supercomputadores, las baterías, los discos, las bases de datos, los sistemas, las herramientas y, por supuesto, a los usuarios en una especie de laboratorio virtual mundial.
LOS REACTORES QUIMICOS.– Han pasado 16 años desde que ocurrió la terrible explosión de un reactor químico en Bhopal (India) que mató a miles de personas y lesionó a decenas de miles más. Hasta ahora, ha sido casi imposible predecir estas explosiones debido al altísimo número de factores que deben ser controlados; sin embargo un nuevo sistema, que ya se está ensayando con éxito en el laboratorio y que aplica un nuevo método basado en la teoría del caos, está demostrando ser más fiable al relacionar acontecimientos que aparentemente no tienen nada que ver entre sí. El proyecto europeo Aware aspira a dar tiempo suficiente cuando algo empieza a ir mal, de manera que se puedan tomar las medidas preventivas. Las plantas químicas que trabajan por el sistema de hornadas, digámoslo así, plantean muchos más problemas que los reactores continuos, como es el caso de la industria petroquímica.
En los sistemas tradicionales se recurre a mediciones de temperatura, presión, acidez y viscosidad para hacer las predicciones, en cambio Aware sigue los cambios de temperatura en un número de puntos clave, evaluando su significado en términos de caos y desencadena la alarma cuando el modelo apunta a una explosión.