Propuestas fiscales

Los asesores fiscales son conscientes de que, aunque se encontrase un hecho aún sin gravar, las autonomías se enfrentarían a un rechazo popular notorio si intentasen crear un nuevo tributo. Por eso son partidarios, como el nuevo consejero de Hacienda, de reformar los ya cedidos y alguno municipal.

PLUSVALÍAS.– Sugieren en primer lugar que los ayuntamientos acomoden su impuesto de plusvalías a la casi desaparición del Impuesto de Sucesiones cuando se trata de los familiares más allegados al fallecido. De esta forma se evitaría la paradoja de pagar mucho más por la plusvalía municipal generada en la transmisión de un terreno urbano que por el Impuesto de Sucesiones de la totalidad de la herencia “lo cual va en contra de toda lógica”, dicen. Proponen que, en coherencia con el espíritu que animó la rebaja del Impuesto de Sucesiones, se bonifique la Plusvalía Municipal, al menos en lo que se refiere a la vivienda habitual del causante.

IMPUESTO SOBRE LA RENTA.– En los tributos estatales cedidos, sugieren utilizar la capacidad de la autonomía para modificar un tramo de las deducciones del IRPF por la compra de la vivienda habitual e incrementarlas hasta el límite máximo cuando el adquirente sea menor de 30 años, tenga minusvalías severas o sea una familia numerosa. También se aplicarían cuando la vivienda esté en un municipio despoblado y para los emigrados que quieran retornar a Cantabria.
Estas medidas incentivarían la emancipación de los jóvenes y mejorarían, indirectamente, las tasas de natalidad en una región afectada por un rápido envejecimiento.

IMPUESTO SOBRE EL PATRIMONIO.- Los asesores son muy críticos con este impuesto, que consideran un castigo a los ahorradores. En su opinión es poco justo, dado que un contribuyente que tenga ahorrados 270.000 euros provenientes de su trabajo ha de tributar en la escala progresiva, mientras que quien posea quince pisos y cinco locales comerciales con un valor cinco veces superior no paga un sólo euro por este impuesto si los tiene alquilados de forma empresarial.
El impuesto español sobre el Patrimonio es, por otra parte, el más elevado de la UE, con un tipo marginal del 2,5%, frente al 0,3% de los cinco únicos países que lo mantienen. Sin embargo, su capacidad recaudatoria es pequeña, ya que apenas aporta el 2% de los ingresos de la comunidad. Por estos motivos, aconsejan aumentar el mínimo exento, desde los 18 millones de pesetas anuales de la actualidad a 45.

TRANSMISIONES PATRIMONIALES Y ACTOS JURIDICOS DOCUMENTADOS.- El Gobierno de Martínez Sieso duplicó este gravamen, al subirlo del 0,5% al 1%. No obstante, fijó un tipo reducido del 0,3% para escriturar viviendas de familias numerosas, de menores de 30 años o de minusválidos severos. Sin embargo, los asesores recuerdan que el tipo del 1% se mantiene para la constitución de las hipotecas, que casi siempre van aparejadas con estas compras, por lo que la nueva regulación no sólo no mejora la anterior sino que resulta más perjudicial, y proponen que el tipo reducido se aplique a todos los conceptos.

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