Confidencial
Un GRAN FAVOR
Pudo ser la casualidad o pudo ser un servicio de protocolo muy bien informado, pero lo cierto es que en la cena institucional que el presidente cántabro ofreció en Madrid la víspera del Día de Cantabria en Fitur, Emilio Botín fue sentado junto al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos. El presidente del Banco Santander no sólo se mostró encantado con su compañero de mesa sino que se sintió en la obligación de explicar el motivo de su satisfacción al resto de los comensales, entre los que estaban otros cuatro ministros, la presidenta de Tribunal Constitucional y los jefes de las mayores empresas del país. Emilio Botín reveló que Moratinos le había hecho un favor muy importante, al conseguir desbloquear la cantidad que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez aceptó pagar por la filial del Santander en aquel país (755 millones de euros) y los dividendos que admitía repatriar.
En diciembre, Chávez envió los talones que restaban para cerrar la operación, pero el Banco se encontró con que no pudo cobrarlos por más intentos que hizo, lo que suscitó la lógica alarma. A la vista de la situación, Botín buscó el apoyo de Moratinos, cuyas gestiones dieron un resultado inmediato: a los cinco días, el Santander tenía el dinero.
El plazo, en este caso, tenía una trascendencia muy especial. Sin las presiones del Gobierno español es probable que Chávez también hubiese acabado pagando, pero el cuándo importaba mucho: Sólo un día después de pagar, Venezuela devaluó el bolívar en un 50%, con lo que el Santander hubiese tenido unas pérdidas multimillonarias en la operación.
La cena de Madrid demostró la capacidad de convocatoria del presidente cántabro. Alguno de los comensales, como Florentino Pérez, presidente de ACS y del Real Madrid –que estaba en Albania, donde jugaba su equipo– no dudó en servirse de un avión privado para anticipar su vuelta algunas horas y poder estar en el evento. El caso de Isidoro Alvarez, presidente de El Corte Inglés, es aún más llamativo. Muy poco amigo de celebraciones, ni siquiera suele acudir a la que convoca su región de origen, Asturias.
CAMPOS FICHA AL EX JEFE DE LA INSPECCIÓN
Manuel Fernández González-Torres, que hasta hace unas semanas ha ejercido como jefe regional de Inspección de la Delegación Especial de la Agencia Tributaria en Cantabria ha sido fichado por el gabinete contable y fiscal santanderino Tecnisa Campos. Fernández González-Torres, que ha solicitado para ello una excedencia, había estado quince años en la Jefatura, una circunstancia que probablemente le convertía en el más veterano del país en el cargo. El nuevo Jefe Regional es Javier Martín Navamuel, un inspector que anteriormente fue Administrador de la Agencia Tributaria en Torrelavega y jefe de la dependencia de Gestión Tributaria.
UNA HUCHA PÚBLICA QUE NO SE MANTENDRÁ
Las empresas públicas regionales han acumulado en sus balances unos recursos financieros de más de 60 millones de euros. En realidad, no necesitan toda esta liquidez para su operativa diaria y, en cambio, el Gobierno sí tiene ocasionales tensiones de tesorería. Así que el Ejecutivo ya ha echado la vista sobre esa hucha y está decidido a ejercer su potestad de único accionista para recuperar parte del dinero inactivo.
UNA CARROCERA PALENTINA SE INSTALARA EN TANOS
A pesar de tener el 60% de su superficie ya vendida, el polígono de Tanos-Viérnoles tiene una ocupación muy baja. Eso no impide que siga llamando la atención de empresarios de otras comunidades. A las firmas de Zaragoza (electrónica e ingeniería) y Burgos (reciclado de vidrio) que compraron suelo en este parque empresarial se une ahora un grupo palentino de carrocerías especiales. Aprovechando la posibilidad de agrupar hasta cuatro parcelas de 500 m2 destinadas a naves modulares, la empresa palentina va a levantar una instalación de 2.000 m2 para acceder al mercado cántabro. Un iniciativa que quizá sea poco significativa en términos de empleo o de inversión, pero alentadora en los tiempos de atonía empresarial que vivimos.
