Confidencial
Fadesa había pactado la compra de El Bojar
Los polémicos terrenos camargueses del Bojar, propiedad de la sociedad Orbovisa, no iban a ser promovidos por esta compañía sino por la constructora gallega Fadesa, la misma que ha puesto en pie la urbanización El Cuco. Pero la operación es posible que se deshaga, ya que cuando Fadesa pactó su compra con el principal accionista de Orbovisa, Miguel Angel Iglesias, no se había producido la polémica sobre el posible uso de información privilegiada por parte de éste en la adquisición previa de las diez hectáreas de suelo rústico a las familias de la zona. Iglesias pagó por ellas 5,4 millones de euros, un precio muy inferior al que tendrían de ser recalificadas por el Gobierno, aunque fuese para viviendas de protección oficial.
Fadesa se ha encontrado con dos problemas simultáneos: las muchas interrogantes que pesan sobre su macrourbanización en El Cuco, tras declararse la licencia ilegal, y las cada vez más oscuras perspectivas para edificar a corto plazo en los terrenos que pensaba adquirir en El Bojar. La constructora que preside Antonio Martín ya había padecido una circunstancia semejante con otras fincas cuya compra había pactado en Bezana y que resultaron afectadas por la paralización urbanística de aquel municipio.
LA VENTA DE PATRIMONIO DEL OBISPADO, A LA ESPERA DE LUZ VERDE
El inminente nombramiento de un nuevo obispo para Santander podría reactivar varias importantes operaciones de venta de patrimonio de la Iglesia que el arzobispo de Oviedo Carlos Osoro, ha paralizado de forma cautelar. La más avanzada de las operaciones suspendidas por Osoro, que administra interinamente la Diócesis, es la referida al Seminario Menor de Argomilla de Cayón, un enorme edificio que no se utiliza. El Obispado llegó a un acuerdo de venta a principios del pasado año con una promotora cántabra, en el que se incluía el pago de una cláusula de penalización de cien mil euros si la operación no se cerraba. El proyecto de estos inversores contemplaba la transformación del antiguo seminario menor en un edificio con 300 apartamentos de lujo, una llamativa fachada acristalada y un reparto interior en forma de lofts. Como complemento, tenía previsto construir en la finca un campo de golf de 20 hectáreas. La promotora no da el proyecto por perdido, si bien hay otra importante constructora cántabra que lo tiene desde hace tiempo sobre su mesa.
Más importante aún para las arcas de la iglesia cántabra es la posible venta de la finca donde se encuentra el seminario de Corbán, la ‘joya de la corona’ del Obispado, una operación seguida con mucho interés por varios promotores.
LUPA HARA UN GRAN CENTRO DE DISTRIBUCION EN PARBAYON
Semark (Lupa) busca desde hace tiempo un polígono donde construir un gran centro logístico que pueda sustituir con ventaja sus instalaciones de la Ciudad del Transportista y esa búsqueda parece haber concluido. El grupo propietario de los supermercados Lupa proyecta instalar una plataforma de almacenaje y distribución en el área industrial que un colectivo formado por setenta empresarios intenta promover en Parbayón. Se trata de unos terrenos colindantes con el futuro parque empresarial de Villaescusa, dentro de una gran zona que fue declarada de interés regional por el POL.
Semark necesita unos 100.000 m2 para poner en pie esos almacenes y una inversión de unos 24 millones de euros. Desde allí abastecerá a su red de tiendas en la zona norte de España.
Además de la cadena Lupa, el grupo de distribución cántabro es propietario de los autoservicios Top Cash, especializados en la venta para hostelería y detallistas de alimentación.
Semark comenzó su actividad en 1984, con la apertura de su primer supermercado Lupa en Torrelavega, y desde entonces ha conocido una enorme expansión, hasta contar con setenta establecimientos distribuidos por Cantabria, Palencia, Valladolid, León y Zamora.
