Cs pide limitar la convocatoria de nuevas subastas de renovables hasta que no pinche la burbuja

Las solicitudes superan en un 350% la potencia renovable instalada

Ciudadanos ha presentado una iniciativa en el Congreso instando al Gobierno a replantearse la autorización de más instalaciones de energía renovable hasta no constatar el pinchazo de la burbuja que, a su juicio, se está acumulando en este sector.

Así, el partido naranja quiere que las subastas para autorizaciones sólo se planteen «cuando el objetivo de descarbonización se vea en riesgo», y que además se endurezcan las condiciones, se exija un plazo para desarrollar los proyectos y se restrinja a proyectos que no cuenten con rentabilidad para instalarse por sí mismos.

Y es que, tal y como relatan en la proposición no de ley recogida por Europa Press, la potencia pendiente de instalación dobla a la ya instalada en todo el sistema eléctrico, con «capacidad holgada» para cubrir el máximo histórico de consumo eléctrico de consumo alcanzado antes de la crisis.

Según datos de Red Eléctrica, sumando las solicitudes de puntos de acceso y conexión con permiso para construir proyectos renovables y el resto de solicitudes sin permiso se contabiliza una potencia renovable pendiente de instalación de 203,9 GW, cuando la potencia renovable ya en servicio se queda en 58 GW: la cifra de solicitudes es un 350% superior a la potencia renovable con la que cuenta el sistema.

Unos datos que, aseguran sus diputados María Muñoz y José María Espejo-Saavedra en la iniciativa, «evidencian una burbuja especulativa con las solicitudes de acceso y conexión a la red» y que atribuyen a «la expectativa de reventa», pues los agentes que se hacen con estos derechos, afirman estos diputados, consideran que «serán capaces de venderlos a un productor de energías renovables con auténtica vocación de construir una instalación».

«¿PARA QUÉ SON NECESARIAS NUEVAS SUBASTAS?»

Aun admitiendo la necesidad de contar con una «sobrecapacidad» de renovables «muy superior» a la actual, se preguntan que, si el volumen de solicitudes supera «con mucho» cualquier expectativa, «¿para qué son necesarias nuevas subastas a día de hoy?».

Por ello, critican «los anuncios reiterados de nuevas subastas», pues creen que «no hacen sino incrementar la especulación en torno a los puntos de acceso», y alertan de que, si estas subastas aseguran un precio determinado al productor durante varios años, «es altamente probable» que en un plazo medio habrá «sobreprecio» en los peajes.

«Si el Gobierno se abstuviese de anunciar nuevas intervenciones, la propia expectativa de los agentes disiparía la burbuja que está teniendo lugar y que corre el peligro de comprometer no solo un enorme volumen de inversiones, sino incluso la estabilidad financiera», concluyen.