Confidencial
Tributos vuelve a dispersarse
Después de una sentencia que instaba al desalojo de los servicios tributarios de atención al público que se prestan en el Edificio Triguero, la Consejería de Economía ha llegado a un acuerdo con la Universidad de Cantabria para trasladarlos provisionalmente a la sede de Librería Universitaria, en la calle Rualasal, donde ya se están concluyendo las obras. Su intención es desplazar a ese local los servicios de ventanilla y caja, y mantener las restantes unidades administrativas de la Dirección General de Tributos en donde están.
El Ayuntamiento de Santander se negó a conceder la licencia de actividad a estas dependencias, al entender que la normativa urbanística de la zona sólo permite servicios de atención al público en las plantas bajas que, en el caso del Edificio Triguero, están ocupadas por un establecimiento comercial. La norma resulta contradictoria con el empeño que demostró el Ayuntamiento en que las sedes administrativas del Gobierno regional se quedasen en el centro de la ciudad y también resulta contradictoria con el hecho de que el propio Ayuntamiento utilice el Edificio Ribalaygua, muy cercano, para oficinas de atención al público.
Economía se vuelve a encontrar, de esta forma, con la misma dispersión de los servicios tributarios que intentó evitar al concentrarlos en el antiguo edificio Láinz, que, además de céntrico, tenía la ventaja para el contribuyente de estar muy próximo a la sede regional de la Agencia Tributaria.
Economía, no obstante, tiene en mente una reubicación a finales de año de todas las dependencias de la Dirección General de Hacienda y hacerlo junto al nuevo Instituto de Finanzas de Cantabria. Su vista parece estar puesta, según algunas fuentes, en el llamado Edificio de Piedra, del Paseo de Pereda, que está ahora en rehabilitación.
SIDENOR QUIERE MAS SUELO
A pesar de ocupar buena parte del polígono reinosano de La Vega, creado en torno a sus instalaciones, Sidenor ha descubierto, después de muchos años, que necesita aún más suelo, pensando quizá en futuras ampliaciones dentro de la reestructuración emprendida por su propietario, el Grupo Gerdau.
El detonante ha sido la intención de un grupo de industriales cántabros de levantar una planta de biodiésel en los terrenos situados frente a la fábrica. La acería ha reaccionado ofreciéndoles la compra de los 14.000 m2 que ocuparía, lo que, de ser aceptado, obligaría a buscar un nuevo emplazamiento para el biodiésel en alguna de las escasas parcelas que todavía quedan libres en el polígono de Reinosa.
LA VENTA DE GERPOSA NO HARA CAMBIAR LA SEDE
La histórica firma de transportes Gerposa se enfrenta a un nuevo cambio, tras la absorción de su propietaria CH Salvesen por el grupo francés de transporte Norbert Dentressangle. Sin embargo, esto no va a alterar el modo de funcionamiento ni la estructura de la multinacional británica en España, que mantendrá su sede central en Santander. Christian Salvesen Gerposa cuenta con 54 centros logísticos en la Península y mueve 1.300 camiones al día. Con su integración en el grupo francés, al que aporta una posición de liderazgo en logística de congelados y frescos y en el transporte por palets, se crea un potente grupo europeo con una cifra de negocio de unos 3.200 millones de euros.
