La adicción al trabajo y su tratamiento

Existen infinidad de adicciones, que pueden clasificarse en adicciones a determinadas sustancias (alcohol, tabaco y otras drogas son las más comunes) y de comportamiento. En este último grupo, entran comportamientos de lo más variados: adicción al juego, al uso de internet, al sexo o al trabajo. Y es que ser trabajador es una virtud, pero serlo en exceso puede dar lugar a la adicción al trabajo, que es un riesgo psicosocial.

En inglés, el término que define la adicción al trabajo es el popular workaholic, que lo relaciona con el alcoholismo. Aunque el término no está reconocido como una patología psicológica, goza de gran popularidad y se identifica con aquellas personas que invierten una desproporcionada cantidad de tiempo y esfuerzo en su trabajo. Dado que el trabajo goza de buena reputación social, no resulta sencillo identificar esta dependencia, algo que es más sencillo en el caso de las adicciones a determinadas sustancias.

Para los adictos, el valor de su trabajo es superior a las relaciones con compañeros, amigos y familiares, por lo que sienten una necesidad incontrolable de trabajar de forma constante, que conlleva consecuencias negativas para esa persona. En muchos casos, esta adicción incluso se relaciona con otras a determinadas sustancias, que les ayudan a superar el estrés. Para ayudar a estas personas, en masferriol.com cuentan con grandes especialistas, así como con diversos programas y tratamientos para acabar con esta y otras adicciones, tanto presenciales como online.

Y es que, aunque los familiares y amigos quieran ayudar a sus más allegados cuando se enfrentan a esta situación, muchas veces no es suficiente. Se necesita realizar un abordaje psicoterapéutico que, dependiendo del grado de adicción, podrá ser en diversas citas con especialistas –in situ o telemáticas– y, en otros, será más fácil de tratar si la persona que tiene esa adicción ingresa en un centro de adicciones.

Internar en este tipo de centros es muy positivo para la completa rehabilitación y desintoxicación del paciente, que en muchos casos precisa de un tiempo de separación de su entorno y las situaciones habituales que vive diariamente. En el caso de la adicción al trabajo, no es diferente.

En un proceso de internamiento, el paciente estará cuidado psicológica y físicamente en un entorno humano y tranquilo que le prestará una atención totalmente personalizada y hará un seguimiento de lo más riguroso de su caso y su evolución.

El tratamiento que los profesionales de este tipo de centros le brindarán al paciente será el de terapia cognitiva-conductual, que tiene como objetivo ayudar al paciente a gestionar y obtener un nivel de autocontrol mayor en su trabajo. Además, le enseña a llenar el tiempo libre que le queda tras realizar una jornada laboral habitual, permitiéndole disfrutar del mismo sin sentirse culpable o sentir que está perdiendo el tiempo.

Además, este tipo de terapias entrenan al paciente en aquellos déficits que pueden aparecer en el origen del problema. Es decir, hacen todo lo posible por garantizar unos resultados satisfactorios y que los pacientes retomen su vida.

Suscríbete a Cantabria Económica
Ver más

Artículos relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Botón volver arriba
Escucha ahora