El Corte Inglés aprueba en su junta el reparto de un dividendo de 125 millones, un 66,6% más

La junta general de accionistas de El Corte Inglés ha aprobado este viernes el reparto de un dividendo de 125 millones de euros, lo que supone un incremento del 66,6% respecto al distribuido el pasado año, según han informado a Europa Press en fuentes del grupo de distribución.

En concreto, la compañía aprobó el pasado año repartir un dividendo de 75 millones de euros, con lo que retornó a los niveles de retribución al accionista de 2019, antes de la pandemia del Covid-19, cifra que este año se ha elevado a 125 millones de euros.

Los accionistas han aprobado este viernes por unanimidad todas las propuestas del consejo de administración, entre las que figuran además la aprobación del informe de gestión, las cuentas anuales del ejercicio 2022 y el informe no financiero.

También se ha ratificado la renovación de tres de los miembros del consejo de administración: Cartera Mancor, que está representada por Paloma García Peña; Corporación Ceslar, representada por Carlota Areces, y Fernando Becker, como consejero independiente.

Durante la junta general de accionistas, la presidenta de El Corte Inglés, Marta Álvarez, ha asegurado que el grupo de distribución español vive «una de las etapas más prometedoras» de su historia con un «futuro apasionante».

«El Corte Inglés vive una de las etapas más prometedoras de nuestrahistoria y tenemos ante nosotros un futuro apasionante», ha asegurado Álvarez en su discurso a los accionistas durante la celebración de la junta en Madrid.

En concreto, la presidenta del grupo ha recordado a los accionistas que el ejercicio 2022 de la compañía fue un año de crecimiento para el grupo, lo que se reflejó en todas las magnitudes económicas y, especialmente, en la obtención del resultado positivo en todos los negocios, según informa en un comunicado.

El Corte Inglés cerró el ejercicio 2022 (a fecha 28 de febrero de 2023) con un volumen global de ingresos de 15.327 millones de euros, lo que supone un incremento del 22,5% respecto al año anterior, mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 951,4 millones de euros, un 18,3% más que el año anterior.

El beneficio neto recurrente del grupo alcanzó los 207 millones de euros, el más alto de los últimos años, mientras que el beneficio neto total se situó en los 870 millones de euros, la mayor cifra lograda por la compañía hasta el momento, gracias a los extraordinarios.

Además, el grupo ha reducido su deuda financiera neta, que se sitúa en 2.295 millones de euros, es decir, 900 millones de euros menos que el ejercicio anterior, situándose en el nivel más bajo de los últimos 15 años.

La presidenta ha destacado que estos resultados llegan por la «buena evolución del negocio, la optimización de costes y el rigor en la gestión, lo que ha permitido consolidar la senda del crecimiento y alcanzar los mayores beneficios de los últimos años».