Home Staging; el arte de transformar espacios para enamorar y vender
Funcionalidad, belleza y estrategia se combinan en una disciplina que convierte viviendas en objetos de deseo. Lo mejor: sin reformas, sin obras y con resultados medibles.
Por Ángel Ferrando, presidente de la Asociación de Home Staging España (AHSE) y director de CDKASA
Una vivienda puede tener buena orientación, ubicación privilegiada y distribución equilibrada. Pero si no emociona a primera vista, difícilmente destacará en un mercado donde la imagen lo es todo. Aquí es donde entra en juego el Home Staging, una técnica profesional que combina diseño, marketing y psicología del espacio para crear escenarios que invitan a quedarse… y a comprar.
El Home Staging no es decoración ni reforma. Es una preparación estética, emocional y estratégica de los espacios para acelerar su comercialización y aumentar su valor percibido. Y los datos lo avalan: según la Asociación de Home Staging España (AHSE), una vivienda tratada con esta técnica puede revalorizarse hasta un 15% y reducir su tiempo en el mercado en más de un 70%, dependiendo del tipo de inmueble y su ubicación.
Datos objetivos que avalan su eficacia
Diversos informes de AHSE y de organismos internacionales como la National Association of Realtors (NAR) o la International Association of Home Staging Professionals (IAHSP) destacan los siguientes resultados:
Incrementos del valor de venta de entre un 5% y un 15%.
Reducción del tiempo de comercialización en un 60?8%.
Retorno de la inversión (ROI) estimado entre 300% y 800%, especialmente en mercados donde el componente emocional influye en la decisión de compra.
La belleza también vende (y mucho)
El Home Staging no responde a modas ni estilos decorativos personales. Su fuerza está en la neutralidad estética, la amplitud visual, el equilibrio cromático y el orden emocional. Se trata de generar atmósferas donde el futuro comprador pueda imaginar su vida desde el primer instante.
Mobiliario ligero, iluminación bien pensada, paletas neutras, texturas naturales y detalles sutiles —como un libro abierto, una manta plegada o un ramo de flores frescas— ayudan a construir una narrativa visual que seduce sin imponer.
Una técnica versátil y rentable
El Home Staging es aplicable a todo tipo de inmuebles:
Pisos heredados o a estrenar.
Viviendas vacías o amuebladas.
Inmuebles para alquiler turístico o de larga estancia.
Promociones de obra nueva o portfolios de inversión.
El coste medio de una intervención profesional oscila entre el 1,0% y el 2,5% precio de venta, una inversión mínima frente al coste de una rebaja en el precio o una larga espera en el mercado. Los resultados hablan: el ROI puede multiplicarse por 3, por 5… incluso por 8, en función del segmento y la estrategia.
Diseño con propósito
A diferencia del interiorismo convencional, el Home Staging no busca personalizar, sino universalizar. No se adapta al gusto del propietario, sino al perfil del comprador potencial. El objetivo es claro: acelerar la decisión de compra a través de una presentación visualmente impecable y emocionalmente neutra.
No se trata solo de decorar, sino de generar una experiencia visual y sensorial capaz de activar el deseo. Un enfoque técnico y estratégico, pero profundamente humano.
La profesionalización del Home Staging en España
Cada vez más inmobiliarias, promotoras, inversores y propietarios particulares incorporan esta técnica como parte esencial de su estrategia de venta o alquiler. En este contexto, la Asociación de Home Staging España (AHSE) juega un papel clave: agrupa a los principales profesionales del sector, promueve formación continua, establece estándares de calidad y recopila datos sobre el impacto real del Home Staging en nuestro país.
CDKASA: transformar para vender mejor
Desde CDKASA, empresa con sede en Alicante especializada en Home Staging y valorización de espacios, hemos transformado y ayudado a transformar, viviendas en toda España. Nuestra misión no es solo embellecer, sino ayudar a nuestros clientes a posicionar mejor su inmueble, atraer más visitas cualificadas y cerrar operaciones más rentables.
Porque en un mercado tan visual como el inmobiliario, vender bien no depende solo de la ubicación. También importa —y mucho— cómo se ve, cómo se siente… y cómo se cuenta.