El Centro de Datos Altamira planea incorporar un complejo de supercomputación cuántica
El consejero de Industria de Cantabria, Eduardo Arasti, ha avanzado que el proyecto Altamira, para la creación de un campus tecnológico de centro de datos, podría albergar un centro de supercomputación cuántica en la región, ya que el promotor del proyecto, Stoneshield Capital, está explorando «de manera activa» la introducción de esa modalidad para dotar al futuro centro de capacidades «más allá del presente y mirando hacia el futuro», con la instalación del que supondría el primer centro de estas características en la comunidad autónoma.
El también titular de Empleo, Innovación y Comercio lo ha adelantado durante su participación en el encuentro sobre la economía digital y las telecomunicaciones que ha organizado esta semana AMETIC, la patronal de la industria tecnológica en España, en el Paraninfo de la Magdalena de Santander, y en el que ha analizado el impacto que tendrá el proyecto Altamira en Cantabria, junto al vicerrector de Transformación Digital de la Universidad de Cantabria (UC), José Luis Bosque, y el CEO de XDC Properties, filial de Stoneshield Capital, Javier García.
«Estamos hablando de un proyecto importantísimo, no solamente por lo económico y lo social, sino también por lo que significaría para la investigación científica como consecuencia de la supercomputación, así como para nuestros jóvenes y para la competitividad de Cantabria», ha subrayado Arasti, quien ha agradecido la «buena predisposición» del promotor para estudiar la posible instalación del que sería el primer centro de supercomputación cuántica en Cantabria.
La mesa redonda protagonizada por Arasti, Bosque y García en el marco del encuentro de AMETIC en la UIMP (Universidad Internacional Menéndez Pelayo) ha girado en torno a dar a conocer a la sociedad las fortalezas y ventajas competitivas «únicas» de un proyecto que, en palabras de Arasti, «significaría dar un giro de 180 grados al sistema productivo de Cantabria y orientarlo hacia sectores con un mayor valor añadido, aprovechando la revolución tecnológica que se está produciendo en estos momentos».
Se trata de un proyecto que «trasciende a Cantabria» y colocaría a esta comunidad autónoma y al conjunto de España como «uno de los polos digitales más fundamentales del sur de Europa» tras una inversión privada de más de 3.600 millones de euros, «la mayor» de la historia de la región, y que es «similar» a todo el presupuesto del Gobierno regional y aproximadamente la cuarta parte de su Producto Interior Bruto (PIB). Supondrá, además, la creación de más de 1.500 empleos de «capacidad superior y bien remunerados».
Entre las «enormes» fortalezas y ventajas competitivas del proyecto, el consejero ha destacado que su eficiencia energética «será imbatible», ya que consumirá menos energía eléctrica que cualquier otro centro de datos de España, y no empleará agua para su refrigeración, dado que Cantabria cuenta con un clima que permite utilizar la ventilación natural por sus temperaturas suaves y sus precipitaciones elevadas.
Además, ha continuado, cuenta con una conectividad estratégica, al estar cerca de varias rutas de fibra óptica que conectan con otros centros de datos, tanto en España como en Europa, y el hecho de que Anjana, el cable submarino de fibra óptica de mayor capacidad del mundo, conectando Europa con Estados Unidos, atraviesa Santander, «proporcionando al futuro Campus una latencia reducida y múltiples rutas de conexión». Una conectividad, ha añadido, que se reforzará «todavía más» con el nuevo cable submarino de Google que también conectará la capital cántabra con EEUU.
A todo ello hay que sumar que ‘Altamira’ tomará la energía eléctrica de la subestación de Penagos, que se caracteriza por ser «un nodo eléctrico, robusto y preparado» para acoger grandes demandas de energía, aportando estabilidad al sistema eléctrico, ya que el futuro campus representa «una oportunidad» de descentralizar el consumo de los centros de datos fuera del eje Madrid-Aragón-Cataluña.
El proyecto, además, plantea una solución eléctrica con dos nuevas posiciones que conectará el Campus a la red eléctrica de una manera «muy sencilla» y que «no implicará ningún gasto de ejecución al sistema eléctrica», si bien ha recordado que necesita ser aprobada en la Planificación de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2026-2030 del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD).