Sodercan gana el pulso a los compradores de Greyco
El pulso sostenido por Sodercan y el grupo comprador Makilex Work para delimitar el compromiso económico que cada parte estaba obligada a asumir en el relanzamiento de Greyco ha terminado con un acuerdo que despeja definitivamente las incógnitas sobre el porvenir de la fundición de San Felices de Buelna.
Sodercan, que ha mostrado una gran firmeza en esta última etapa de la negociación, ha logrado que el grupo vasco se comprometa a invertir 4,1 millones de euros en el plan industrial diseñado para reflotar las antiguas empresas de Fundicobesaya (Greyco, Veta y Meibe), así como al mantenimiento del centenar de puestos de trabajo que tienen.
A cambio, Sodercan cumplirá los compromisos de financiación a los que llegó en junio de 2005 con Makilex Work, para facilitar que este grupo industrial se hiciera cargo de unas empresas a las que la pésima gestión de sus anteriores propietarios habían colocado en trance de desaparición.
La empresa pública Sodercan había llegado tan lejos en su intento de evitar la pérdida de esos puestos de trabajo que acabó convertida en propietaria de la fundición y de sus empresas auxiliares. Una situación anómala de la que intentó salir buscando alguna firma con experiencia en ese sector industrial que estuviese dispuesta a hacerse cargo del grupo de Buelna. Tras algunos intentos fallidos, encontró la respuesta afirmativa de unos empresarios vascos con gran experiencia en el mundo de la fundición, Makilex Work.
Tras un acuerdo de venta al que se llegó hace dos años, este grupo se hizo cargo de la gestión de las tres empresas afectadas y buscó con éxito nuevos canales de comercialización para sus productos, destinados sobre todo a la automoción. Ya entonces los empresarios vascos se comprometieron a aportar cuatro millones de euros antes del año 2010 para modernizar y relanzar la fundición. Entre los compromisos de este grupo industrial se encontraban también la creación de una planta de mecanizado con 25 empleos nuevos y la desviación hacia la planta de San Felices de una línea de fundición en aluminio que hasta entonces venía realizando en Vitoria.
Los compromisos de Sodercan
Por su parte, Sodercan se ofreció a aportar financiación para facilitar la ejecución del plan industrial, algo que tendrá que cumplir, una vez que Makilex se ha comprometido, por fin, a hacer la inversión prevista. Sodercan entregará a fondo perdido 461.000 euros (el máximo legal posible), además de un préstamo de 1,8 millones de euros a reembolsar en un plazo de diez años. También facilitará la obtención de líneas de descuento por importe de un millón de euros y pagará 604.000 euros por la diferencia entre el 50% de quita a los acreedores previsto en la deuda acumulada por Greyco en su anterior etapa (cerca de doce millones de euros) y el porcentaje efectivo, en el caso de que la Seguridad Social no derivase la responsabilidad del pago de la deuda sobre los nuevos propietarios. En caso contrario, la cantidad a aportar por Sodercan alcanzaría los dos millones de euros.
