Buruaga descarta acogerse a la condonación de deuda que supondría un ahorro de 809 millones
La presidenta de Cantabria reclama una reforma integral del sistema de financiación autonómica: "La deuda solo cambia de bolsillo", critica
La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha descartado acogerse a la condonación de deuda aprobada este martes por el Consejo de Ministros y que supondría un ahorro de 809 millones para la región, al considerar que se trata de una «huida hacia adelante» del Gobierno de Pedro Sánchez que tiene «muy pocas probabilidades de prosperar», al tiempo que ha reclamado una reforma integral del sistema de financiación autonómica.
«No vamos a caer en esa trampa», ha asegurado Sáenz de Buruaga, quien ha insistido en que «la deuda no desaparece, la deuda solo cambia de bolsillo, se mutualiza, se reparte ahora entre todos los españoles».
La presidenta cántabra ha señalado que esta medida supone «un claro expolio para la solidaridad interterritorial» y ha advertido de que el «hipotético ahorro» que pudiera conseguir Cantabria «en ningún caso puede ser utilizado para mejorar la sanidad, la educación o los servicios sociales».
«Nosotros no hemos pedido esta falsa condonación, ni necesitamos seguir acudiendo al FLA (Fondo de Liquidez Autonómico) para financiar», ha recalcado, al tiempo que ha destacado que Cantabria ha «recortado la deuda de verdad» y que actualmente tiene su deuda autonómica por debajo del 17% del PIB.
En este sentido, Sáenz de Buruaga ha insistido en que la «solución real y efectiva» pasa por «una reforma integral del sistema de financiación autonómica, de forma multilateral, de forma consensuada, de forma transparente, y pasa también por encajar ahí una restructuración de la deuda autonómica frente a la condenación».
«Pase lo que pase, diga lo que diga, nosotros vamos a seguir defendiendo lo que hemos defendido siempre en todos los foros, que es la igualdad entre ciudadanos y la solidaridad entre territorios», ha enfatizado la presidenta, quien ha advertido que, si es necesario, acudirán a los tribunales.
«Tampoco nos va a temblar la mano ante eso», ha aseverado Sáenz de Buruaga, quien ha calificado la medida del Gobierno como una «estrategia», una «maniobra» y una «clara huida hacia adelante» con «muy pocas posibilidades reales de prosperar».



