La emoción de volar, ahora al alcance de todos
Desde siempre, la humanidad ha soñado con volar. Gracias a la tecnología, se ha conquistado el cielo con aviones, helicópteros e incluso naves espaciales. Pero ninguna de estas opciones ofrece la libertad de vuelo que se suele imaginar. Existen pocas actividades que realmente permitan sentir la sensación del vuelo en la propia piel, como el paracaidismo o el puenting, pero no son aptas para todas las personas. Afortunadamente, existe una forma de volar accesible para cualquiera.
Se trata de un túnel de viento vertical, que permite experimentar la sensación de volar en un entorno totalmente seguro. Equipado con cuatro turbinas, genera un flujo de aire que sostiene a la persona en el aire. Lo que comenzó como una herramienta para la investigación aerodinámica, se ha convertido en una experiencia emocionante.
En Cataluña hay dos instalaciones destacadas:
El túnel de viento en Empuriabrava, en la provincia de Girona, ideal para combinar con un día de playa.
El túnel de viento en Cornellá, Barcelona, perfecto para escapadas urbanas.
Ambos centros tienen como misión acercar el vuelo indoor a todo tipo de personas, con instructores expertos y un entorno seguro.
Una experiencia única para todos
Es posible volar a partir de los 4 años y sin límite de edad (el récord lo tiene un aventurero de 92 años). También está adaptado para personas con movilidad reducida. Las únicas restricciones son para personas embarazadas o con dislocación de hombro no operada.
¿Cómo funciona?
La aventura comienza con una breve clase teórica, donde los instructores explican las señales de comunicación y la postura correcta. A continuación, se proporciona el equipo necesario: traje, gafas, tapones y casco.
Los vuelos son individuales, con un instructor que ajusta la velocidad del viento. La primera sesión sirve para adaptarse, y en las siguientes se aprenden movimientos básicos. Para quienes buscan más adrenalina, existe la opción «Twister», donde el instructor hace girar y ascender al participante hasta 12 metros de altura. Quienes han probado esta modalidad describen la experiencia como espectacular y liberadora de estrés.
¿Por qué elegir un túnel de viento?
Se ofrecen varios paquetes de vuelo, pero el más popular es el Wind3, que incluye tres vuelos. Mientras que un salto en paracaídas dura unos 40-45 segundos, en el túnel cada vuelo dura un minuto completo. Y lo mejor es que se puede disfrutar sin necesidad de saltar de un avión, ahorrando tiempo, dinero y nervios, pero con la misma emoción.
Además, estos centros ofrecen programas de entrenamiento para aprender técnicas avanzadas, desde “belly-flying” hasta “headdown flying”, y son utilizados por paracaidistas profesionales. De hecho, en 2025, el túnel de viento Windoor acogió los Wind Games, donde compitieron 120 atletas de todo el mundo. Los instructores de Windoor son campeones de España.
El túnel de viento es la forma más segura y emocionante de cumplir el sueño de volar.
¿Quién se atreve a probarlo?